domingo, 9 de noviembre de 2014

Iguala de la Independencia. Descontrol absoluto



México es el 15º país del mundo por llegadas de turistas internacionales. Un buen puesto teniendo en cuenta que en el mundo hay 194 países reconocidos. Un buen puesto que en mi opinión no consigo explicarme, ni de lejos.
México es, sin duda, un país con un inmenso potencial. Hermoso, gastronómicamente incomparable y muy rico en cultura e Historia, aunque desgraciadamente la mayoría no esté aprovechada y, en mucho casos, ni si quiera cuidada. ¿A quién le importa? Si con un esfuerzo mínimo se sitúan en el puesto 15, ¿para qué hacer más? Es lógico.
Aun así a mí me sorprender que la gente tenga miedo de viajar a ciertos lugares y a otros se vaya tan ligeramente. Porque México es uno de esos lugares en los que uno no acaba de creerse las cosas que ve o que lee. Y es que el chorreo es constante, que si seis turistas españolas violadas en Acapulco, que si 360 mujeres asesinadas, 600 desaparecidas y subiendo en Ciudad Juárez, que si 754 secuestros en 2013… y así hasta la gota que colma todos los vasos: los estudiantes de Ayotzinapa. Un caso entre muchos, uno que ha tenido la suerte de salir a la luz, pero uno que tristemente, ni es el único, ni es el primero ni muchísimo menos va a ser el último.
El hecho de que haya delincuencia es un punto en contra, corrupción, problemas con la droga… bien, hasta ahí podemos pensar que entra dentro de lo normal. Todas las sociedades adolecen de un grupo  más o menos amplio de manzanas podridas. Unos más y otros menos. Pero normalmente, repito, normalmente, el monopolio de la maldad lo tienen los “malos”. Cuando la policía pasa a formar parte de ese grupo y peor aún, cuando lo lidera… yo ya no sé a dónde llevarme las manos. Ole, ole. Si los que trabajan (y cobran de nuestro dinero) para defendernos son los que nos extorsionan (de hecho la mordida es casi un sello de identidad de México), nos secuestran y nos matan, apaga y vámonos. Yo espero, en mi cabeza estructurada por el primer mundo, que me secuestre un terrorista, que me ataque un loco… y que venga un policía y me defienda, me ayude, me salve. Si estas no son las reglas con las que se juega en México, yo, personalmente, no pondré allí mis pies.
Todos sabemos que México no es el país más legal del mundo, que la corrupción está a la orden del día, pero bien mirado… ¿cuál lo es? Porque en España de corrupción tenemos todos un máster. Pero cuando la inseguridad alcanza esas cotas, ya la cosa pierde el sentido, ya no sabemos con qué reglas vamos a jugar. Y yo sin reglas no juego, porque no estoy segura de poder ganar. Arriesgarse tontamente… es tontería. Y mientras la cosa no cambie, no mejore, no se haga nada, no merece la pena. Pero ¿qué hacer? Obviamente el paquete a los locales, ya se les ha ido de las manos. ¿Entonces? ¿Cómo Estados Unidos podía sentirse tan amenazado por un país casi al otro lado del mundo y no notar nada ahora? Ahí sí hay mucho que rascar, y lo mismo los vecinos del sur necesitan que alguien les eche una mano. Recordemos que México también tiene petróleo y que si bien, no está gobernado por un dictador loco, sí lo está por un loco que además es un ignorante absoluto… que a mi juicio es casi peor, porque no tiene ni la más remota idea de la que está liando. Y para luego, va a ser tarde.
Como sazonador os invito a ver este VIDEO  tan representativo de la locura del ser humano y de lo que se está cociendo en el Nuevo Mundo. Para terminar aprovecho las palabras con las que termina el señor Murillo Karam, porque definen exactamente lo que siento: “A mí, me duele este asunto”.

martes, 5 de agosto de 2014

Lo inteligente es alquilar en vacaciones





Ahora que está tan de moda esto de alquilar alojamientos turísticos para pasar nuestras vacaciones, al mismo tiempo que conocemos un destino como la palma de nuestra mano y disfrutamos de nuestros días de descanso, es posible también ahorrarse unos euritos en el presupuesto. Nada mejor en los tiempos que corren. Y debe ser cosa buena, no hay más que ver los esfuerzos que hace el gobierno por regular este nicho de mercado y ponerlo cada vez más difícil. Ninguna publicidad es mejor para dejar bien claro que es la mejor manera de irse de vacaciones.

Y es que quizá pasearse por la llanura manchega no sea una elección cara en ningún caso, pero acercarse hasta la playa, con lo bonitas que son las españolas… hace que el euro rinda menos y haya que recortar. De ahí que sea mejor buscarse la vida y elegir uno mismo qué clase de alojamiento quiere y dónde lo quiere. A mí me parece que Internet en ese sentido ha hecho maravillas, abriendo mercados y facilitando las cosas a los que somos de naturaleza perezosa. Por ejemplo, Niumba, dispara en todas direcciones y te ofrece viviendas de lujo que, en otras circunstancias deberíamos conformarnos con ver en las fotos delas revistas, acompañadas de unos suspiros nostálgicos. Pero ¿quién quiere una villa de 150 metros cuadrados en Menora cuando nosotros trabajamos en Madrid? Esas casas no se limpian solas… y poder disfrutarla una semana sin más preocupación que tendernos mano sobre mano bajo el sol, es un lujo, que sí podemos permitirnos. ¿Quién quiere pasar sus vacaciones año tras año en el mismo apartamento de Salou, por muy lujoso y bonito que sea? Es mucho más práctico alquilar un apartamento nuevo unos días y el año que viene, alquilar otro diferente en otro sitio. Así podemos conocer diferentes destinos. ¿Quién puede querer vivir en una casita rural perdida en algún lugar de Andalucía por mucho encanto que tenga? Esas cosas surgen y una vez seguro que resulta un lugar encantador, pero quizá, el mes que viene, nos apetezca más escaparnos a otra provincia… que en España hay muchos sitios que descubrir y es obligatorio visitar el mayor número posible de ellos, si queremos decir que conocemos realmente el país.
Niumba tiene algo así como 25.000 apartamentos turísticos, más de 1.000 casas rurales y más de 1.000 villas para elegir. No hay excusa para no conocer el país entero, probar todo tipo de experiencias y posibilidades y disfrutar con todos los sentidos. ¿Quién quiere una segunda vivienda de vacaciones cuando puede tenerlas todas y además ahorrar dinero?
Pero vamos, que quien dice vacaciones dice escapada, dice celebración, dice despedida de soltero, dice luna de miel o dice simplemente… porque sí. Y voy más lejos, porque no sólo hay villas, casas rurales o apartamentos, sino estancias tan originales como un molino de harina, una casa decorada con obras de arte, una casa racionalista patrimonio de Barcelona o una Hacienda de olivar del silo XVII… por ejemplo. A veces hay que darse un capricho y sentirse como un rey, como una reina… como un niño y pasárselo bien antes de volver a la rutina, ¿no os parece?
El caso es que podemos dar la vuelta al mundo alquilando casas ajenas y disfrutando de la buena vida, pero si queréis estar de moda y seguir la tendencia de este año, Niumba ha elaborado un informe con los destinos más punteros para el verano 2014. La playa se lleva el gato al agua con 9 de cada 10 reservas. Sol y playa para las vacaciones, pero ¿dónde? Pues está claro: Cádiz, Baleares y Málaga. Seguidos de cerca por Alicante, Valencia, Almería, Canarias, Castellón, Huelva y Tarragona. El sur y el levante español están de moda y si queréis ser parte de los trending topic veraniego, ya sabéis a dónde tenéis que ir en vacaciones.

lunes, 21 de abril de 2014

Deja que Triporg organice tu viaje



Nace una nueva herramienta para la organización de tus escapadas.
Dicen que lo mejor de un viaje son los días previos a él. Es cierto, pero desde luego no lo es, ni mucho menos, la parte en la que tenemos que invertir horas y horas en la organización. Internet, para bien o para mal, ha supuesto la liberalización de las tecnologías y la información, hasta tal punto que, hoy en día no hace ninguna falta acercarse hasta la agencia de viajes de toda la vida para que alguien, con preparación suficiente, nos ayude a decidir, elegir, comprar y pagar lo que serán nuestras vacaciones. Pero esa labor a veces se hace tediosa, complicada e incluso aburrida. ¿No es cierto? De hecho, a veces tenemos esa innegable sensación de desamparo. Tanta información… puede ser poco rigurosa, puede ser parcial o aún peor, a veces puede ser fraudulenta, lo que nos lleva a temer que puedan estafarnos a la hora de contratar nuestro viaje.
Para eso, ha nacido Triporg. Un portal especializado en viajes y pensado para facilitar al máximo la labor de organización de cualquier persona que quiera  conocer otras ciudades y culturas. No hace falta tener ninguna idea previa. Basta con registrarse y dejarse llevar.  Además es gratis.
Para empezar a tomar contacto, puede ir a tiro hecho y elegir el destino que más te gusta, pero si no lo tienes claro, entonces te sugieren una serie de ciudades que puedes recorrer virtualmente para decidirte definitivamente. Después, en ese recorrido virtual, puedes ir marcando todos los sitios que te parecen interesantes y el programa se encargará de calcular la ruta para que puedas visitar todos esos lugares durante tu estancia en esa ciudad. Te marca el tiempo que tardas en desplazarte de un punto a otro, las actividades interesantes que puedes realizar allí y te da algunos consejos. Aunque lo mejor de todo es que gestiona el tiempo de tal manera que lo aprovecharás al máximo y no perderás ni un minuto de tus vacaciones. Y esa es una de las cosas que más le importan a un viajero. Aprovechar bien el tiempo.
También dispone de una agenda, que incluye los eventos, ferias, exposiciones y celebraciones en general, más divertidos y más interesantes que tendrán lugar en esa ciudad, durante el tiempo que estés en ella. Además, y en mi opinión, eso es quizá lo mejor, también ofrece apps para tu móvil, lo que quiere decir que una vez organizado el viaje y con todo cerrado y confirmado, lo puedes llevar en tu bolsillo… pero ¿y si algo cambia? Pues lo marcas en tu selección y la ruta se recalcula sobre la marcha, porque también hay que dejar lugar para la imaginación y la improvisación.
Para mí es una gran oportunidad, aunque como muestra un botón… simplemente hay que probarlo, porque al fin y al cabo, ¡no perdemos nada!